Tendencias de M&A en 2T 2025: menos operaciones, mayor riesgo

Bifurcación del mercado, focos sectoriales y el camino hacia el 2S

El 2T de 2025 mostró una marcada divergencia en la actividad global de M&A: mientras el volumen de operaciones cayó cerca de un 17% interanual, el valor total de las transacciones aumentó más de un 30%, impulsado por una oleada de megadeals. Con solo ~10.900 operaciones anunciadas —el recuento más bajo desde 2015 (excluyendo 2020)— el mercado ha virado claramente hacia operaciones menos numerosas pero de alta convicción.

Tendencias de M&A en 2T 2025: menos operaciones, mayor riesgo

2T 2025 en síntesis:

📉 Volumen: –17 % interanual (~10.900 operaciones)

💰 Valor: +30% interanual (~$969B)

📊 EE. UU. con múltiplos al alza; Europa/APAC a la baja

📦 Dry powder de PE: >$1T; más operaciones lideradas por GP

🌍 Américas: 61% del valor global; el flujo APAC → Américas se duplicó

Visión de mercado: volumen, valoraciones y factores impulsores

La actividad global de M&A en el 2T de 2025 reflejó una desconexión notable entre volumen y valor. Los volúmenes cayeron un 17% frente al 2T de 2024, alcanzando su nivel más bajo desde 2015 (excluyendo 2020), con ~10.900 operaciones anunciadas. Sin embargo, el valor agregado subió alrededor de un 30%, cerrando el trimestre en aproximadamente 969.000 millones de dólares. Esta bifurcación subraya un mercado cada vez más definido por operaciones de alta convicción y alto valor, especialmente en grandes capitalizaciones y segmentos estratégicos.

Las valoraciones reflejaron cambios en la dinámica global. Los múltiplos en EE. UU. aumentaron en el 1S de 2025, mientras que en Europa y APAC descendieron. Las operaciones de gran capitalización (>$1.000 millones) se valoraron alrededor de un 37% por debajo de los máximos de 2021, prolongando una corrección plurianual que ha estrechado la brecha con los múltiplos del mid-market. Este reajuste está mejorando el atractivo relativo de las operaciones a gran escala, en particular para compradores que buscan escala y sinergias en un entorno más sensible al precio.

Han reaparecido varios vientos de cola. La confianza regresa gradualmente tras la pandemia, con corporaciones y patrocinadores de PE mostrando renovada urgencia estratégica —especialmente en capacidades digitales, integración ESG y resiliencia operativa—. La disponibilidad de capital sigue siendo favorable, sobre todo en private equity, donde el dry powder, la mejora de las condiciones de crédito y el aumento de operaciones secundarias y lideradas por GP impulsan un flujo selectivo de operaciones.

Estas dinámicas se han manifestado de forma distinta según el tipo de comprador, con patrones diferenciados entre estratégicos y financieros.

Compradores estratégicos vs. financieros

Los compradores corporativos continuaron impulsando adquisiciones audaces y transformacionales en el 2T de 2025, orientadas a la consolidación y a la escala en sectores con altos costes fijos y solapamiento estratégico. Entre los megadeals destacados figuran la adquisición de Cox por parte de Charter Communications por 34.500 millones de dólares y la toma de control de Calpine por Constellation Energy por 26.600 millones, ambas emblemáticas de movimientos para reforzar el posicionamiento central en utilities, telecomunicaciones y energía. Para muchas corporaciones, el M&A sigue siendo una palanca clave para acelerar la expansión de capacidades en un contexto de sensibilidad de costes.

Por su parte, las firmas de private equity navegaron vientos en contra persistentes —mayores costes de financiación, actividad de salidas contenida y más de un billón de dólares en dry powder a la espera de desplegarse—. Aun así, la confianza regresa en la parte alta del mercado. Siguen adelante los buyouts de gran escala, a menudo con mayor componente de equity dado que los prestamistas permanecen selectivos. Las operaciones lideradas por GP y las secundarias de LP se utilizan cada vez más para desbloquear liquidez y desplegar capital. Cabe destacar que las condiciones de crédito han mejorado desde 2024, con volúmenes de préstamos de nueva emisión más que duplicados interanualmente, proporcionando flexibilidad adicional a patrocinadores bien capitalizados.

Detrás de las cifras generales, las tendencias sectoriales y geográficas ofrecen más información sobre qué —y dónde— están apuntando los compradores.

Tendencias sectoriales y focos transfronterizos

El impulso sectorial en el 2T de 2025 estuvo liderado por actividad de alto valor en industrias intensivas en infraestructuras y orientadas al futuro. La infraestructura de IA, los centros de datos, la defensa y el climate-tech destacaron, reflejando una clara preferencia inversora por activos escalables, resilientes y estratégicamente esenciales. En EE. UU., las operaciones de medios y entretenimiento repuntaron hasta 39.000 millones de dólares solo en mayo, mientras que el sector de energía y utilities registró 28.000 millones en valor de operaciones. El interés del private equity se mantuvo sólido en verticales ligeras en activos y centradas en servicios, especialmente donde los ingresos recurrentes y márgenes defendibles respaldan la creación de valor a largo plazo.

La actividad transfronteriza mostró un cambio geográfico claro. Las Américas representaron aproximadamente el 61% del valor global de operaciones, con la actividad intrarregional en EE. UU. aumentando cerca de un 16% trimestre contra trimestre. Los compradores de APAC duplicaron su inversión en las Américas, lo que subraya la estabilidad económica relativa y la disponibilidad de activos en la región. Aunque las tensiones geopolíticas —desde la incertidumbre arancelaria hasta los conflictos en Oriente Medio— pesaron sobre algunos flujos transfronterizos, grandes operaciones por consorcio, como la adquisición de Santos, siguieron avanzando, reflejando un apetito sostenido por la escala y la diversificación en mercados seleccionados.

Perspectivas para 2S 2025: aspectos a vigilar

La segunda mitad de 2025 se perfila como un periodo de optimismo prudente, con compradores estratégicos y financieros observando de cerca la dinámica de precios, los mercados de capitales y las señales geopolíticas.

Se espera que la estructuración siga siendo adaptable. Los earn-outs, la financiación del vendedor y la modelización multiescenario continuarán utilizándose para salvar brechas de valoración y gestionar la volatilidad. La flexibilidad en los términos y una mayor dependencia de contraprestaciones contingentes serán clave en situaciones competitivas o inciertas.

La disciplina estratégica será crítica. Las corporaciones y los fondos de PE que buscan asegurar activos de alta calidad se centran cada vez más en el deal flow propietario, las oportunidades off-market y la due diligence digital. La rapidez, la preparación y la certeza de ejecución seguirán siendo diferenciadores competitivos, especialmente en procesos ajustados.

Aparecen señales de recuperación, aunque aún incipientes. Una trayectoria más clara de los tipos de interés, una política arancelaria más estable y la mejora de las condiciones del mercado de capitales podrían desbloquear actividad embalsada. La captación de fondos de PE cayó ~13% en el 1S de 2025, pero indicios de repunte en el 2T apuntan a resiliencia subyacente. Se espera que el M&A corporativo se mantenga estable, mientras que la actividad de PE podría volver a niveles previos a 2018 si se estabilizan las condiciones.

Conclusión

El 2T de 2025 marca un punto de inflexión estratégico: menos operaciones pero más impactantes, mayor confianza entre compradores orientados al valor y una estructuración pragmática. Las corporaciones y los fondos de PE que prioricen la resiliencia digital, el deal flow propietario y estructuras flexibles estarán mejor posicionados para el éxito en el 2S y más allá.